Hoy compartimos cinco hábitos y consejos basados en la ciencia para controlar la quema de calorías, pero más específicamente (y lo que es más importante) aumentar la oxidación y la utilización de grasas. Después de todo, el verdadero objetivo no es solo quemar calorías, sino quemar grasa.
Sesión de sauna (o jacuzzi)
Hay muchos beneficios de la terapia de calor mediante el uso de una sauna. Baste decir que quemar calorías es en realidad el menos emocionante de todos.
Según la investigación, la temperatura promedio para muchos beneficios es de 170 grados Fahrenheit o 76 grados Celsius durante unos 20 minutos, repetidos varias veces a la semana. Sin embargo, para aquellos que aún no se han aclimatado al calor, una temperatura o duración más baja es un lugar más seguro para comenzar. El objetivo es aumentar gradualmente la frecuencia de la reunión para que se convierta en parte de su ritual de bienestar semanal.
Café antes del ejercicio
La cafeína es un sinergista (con beneficios que mejoran el rendimiento), pero también puede aumentar la movilización y oxidación de grasas al amplificar la liberación de adrenalina
En pocas palabras, si le gusta la cafeína y puede usarla de manera segura, tome alrededor de 100-400 mg de café. Prueba a tomarlo media hora antes del ejercicio o entrenamiento.
Fidget (movimientos inquietos)
Esto cae en la categoría de termogénesis de actividad sin ejercicio (NEAT) y puede explicar el alto gasto de calorías a lo largo del día. Rebotar la pierna, golpear los pies, movimientos exagerados con los brazos mientras hablas, levantarte con frecuencia desde tu silla, todos estos pequeños movimientos se componen de tener un papel importante en la movilización y oxidación de la grasa para obtener energía.
Ir a la cama temprano
No es una estrategia para quemar más calorías, pero es una de las herramientas más efectivas para evitar quemar calorías extra. Porque no hay nada como hacer un trabajo serio para quemar calorías durante el día… simplemente saboteando tus esfuerzos más tarde esa noche.
Esta práctica es para aquellos que no pueden resistir los bocadillos nocturnos. Para una mejor práctica y para aprovechar al máximo esta técnica diaria, recomiendo evitar todos los refrigerios después de las comidas, o al menos detenerse unas horas antes de acostarse.